Arrancó la Copa Suramericana y Atlético Nacional se dio un festín en Perú. A Municipal el ritmo le aguantó para los primeros veinte minutos y después tuvo que ser testigo de la aplanadora paisa. Rueda y sus muchachos van por la otra mitad de la gloria.
Reinaldo Rueda paró su ya habitual 4-2-3-1. Las principales novedades fueron la vuelta a la titular de Francisco Nájera, en detrimento de Dávinson Sánchez (nuevo jugador del Ajax de Holanda); el doble cinco estuvo conformado por Diego Arias y Matheus Uribe, en reemplazo de Sebastián Pérez y Alexander Mejía. Y arriba sólo se mantuvo Orlando Berrio, con respecto al equipo campeón de América, pues sus compañeros en el tridente ofensivo fueron Ezequiel Rescaldani y John Edison Mosquera, reemplazando a Marlos Moreno y Miguel Borja.
Por su parte, Municipal comenzó el partido con un 4-3-2-1. El equipo peruano, dirigido por el argentino Marcelo Grioni, arrancó ordenado, presionando muy bien la salida de Nacional y obligando a pasar el juego por los centrales del equipo colombiano, quienes en repetidas ocasiones tuvieron que acudir al pelotazo. La presión agresiva sobre Uribe, Arias y Macnelly le impidió al equipo verde hacerse con la posesión del balón. En los primeros veinte minutos, Municipal, si bien controló la salida en limpio de Nacional, no pudo generar peligro en el arco de Franco Armani. Tal vez fruto del cansancio, la presión de Municipal fue disminuyendo y la dupla Uribe-Torres se fue adueñando del balón.
De igual manera, Berrio comenzó a ser más incisivo por la banda derecha. En el minuto 30’, después de un tiro de esquina vino el primer gol del partido. Dicen que dos cabezazos en el área son casi siempre son gol, bueno, pues si son cuatro no hay duda. Un centro de Daniel Bocanegra fue cabeceado por John Edison Mosquera, el balón fue despejado por el capitán de Municipal, Orlando Contreras, nuevamente cabeceado por Mosquera y finalmente, Uribe cabeceó con gran potencia para vencer al arquero, Julio Aliaga. El primer tiempo terminó con dominio de Nacional, que a través de la pausa de Torres y las incursiones ofensivas de Berrio siguió generando peligro.
El segundo tiempo comenzó igual. Dominio y posesión por parte de Nacional, mientras que Municipal esperaba recogido en su campo. En el minuto 58’, Diego Arias recibió el balón de Berrio y, desde fuera de las 16 con 50, sacó un remate fortísimo que dejó sin opciones a Aliaga. Un 2 a 0 a favor de los antioqueños, que se imponían de manera clara sobre su rival. Después, una gran jugada colectiva entre Bocanegra, Macnelly y Berrio incrementaría la ventaja.
En la recta final, cuando la serie ya estaba liquidad, vendría un nuevo gol de Nacional. El ingresado Alejandro Bernal -que remplazó a Torres- recibió un pase de Bocanegra, la dejó picar una vez y clavó un verdadero golazo. El quinto llegó a raíz de un centro de Mosquera, que cabeceó el panameño Roderick Miller, reemplazante del capitán Henríquez.
El partido fue cómodo para Nacional. Los de Rueda siguen demostrando por qué son los mejores del continente. Hablar de favoritos, claro, parece muy prematuro. Todos los partidos son distintos y el fútbol es una dinámica de lo impensado. Cualquier cosa puede pasar, pero por lo pronto, con este 0-5, Nacional ya parece montado en la siguiente ronda de esta Copa Sudamericana.
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