En un show de fútbol de ataque el equipo de Almirón se llevó los tres puntos en el clásico paisa.
Almirón nos supo sorprender
En la derrota en la Paz por Copa vimos a la versión más ‘clásica’ de la era Almirón: defensa de cuatro, tres volantes de buen pie en la mitad y tres atacantes veloces. Cuatro días después, en el clásico contra un DIM bastante mejor que el del semestre pasado, el entrenador argentino cosió por todas partes al equipo: salió con linea de tres, volantes carrileros, tres finos volantes, un media punta y un nueve de referencia. El cambio fue abrupto pero la puesta en escena fue sensacional.
Cuando el cuerpo técnico vea el video de nuevo deberá tomar nota de errores en defensa, pues el Medellín lastimó mucho con a la espalda de Bocanegra y Braghieri, pero también estará muy satisfecho con el desempeño en ataque. Vimos a un equipo con muchos recursos, rico en ideas y muy contundente cuando aceleraba.
Funcionó bien la intención de darle alas para atacar a Helibelton Palacios y Delgado (Mafla en el segundo tiempo). Fueron profundos, ganaron la raya varias veces y con su dinámica arrastraban hombres limpiándole zonas de la cancha los volantes para elaborar. El centro de Helibelton en el gol de Dayro fue una maravilla.
La segunda juventud de Aldo
Nacional tiene el medio campo técnicamente más rico del fútbol colombiano. Contar con Campuzano, Aldo, Macnelly y Castellani es una bendición para Almirón. En ese contexto, de jugadores dúctiles e inteligentes, que se conocen y se buscan, que tienen laterales y delanteros muy rápidos pasándoles permanentemente, estamos viendo una versión maravillosa de Aldo Leao Ramírez.
De los jugadores de campo fue el mejor del partido. Siempre es apoyo y opción de pase para Campuzano en la base de la jugada, pero no se conforma con ser un volante posicional que sólo le da fluidez a la circulación. No. Aldo está mostrando un ida y vuelta que pensamos no íbamos a ver más a sus 36 años. Es socio de todos. Está lúcido, fresco y comprometido. Que bueno para Nacional y la liga revivir lo mejor de este excepcional jugador.
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Golpear sin mandar
No es ninguna casualidad que el Medellín sea el segundo equipo más goleador (20 goles) de la liga. El DIM en todas las etapas del partido le generó peligro al rival. Lo hizo de varias maneras: desbordando por los costados, con pelotas cruzadas al área, de medio distancia, combinando por dentro. Estuvo muy mal en la definición y se encontró con un enorme David González.
Sin embargo, lo que tenemos que destacar es la capacidad de este equipo para ser peligroso sin encontrar la mejor versión de su juego. A pesar de perder a la media hora a Cano por lesión, de que Cataño pesó muy poco y Caicedo entró poco en juego, generó siete ocasiones claras de gol. Con chispazos, la velocidad de Córdoba y la inteligencia de Ricaurte el DIM contribuyó a que viéramos un excepcional clásico. Fue un homenaje al fútbol de ataque.
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Foto: as.com