Aunque Johan Mojica apareció hace poco en la órbita de la Selección, tiene condiciones para ser titular.
En el 2015 teníamos una escasez alarmante de laterales izquierdos en la Selección. Pues ‘Miñia’ en Brasil 2014 logró expresar la mejor versión de su carrera, y a pesar de las críticas que recibía por su poca ductilidad técnica, al bajar su nivel e irse del equipo dejó un vacío en un puesto que en ese momento no tenía grandes herederos.
Mientras Fabra fue creciendo en Medellín y en Boca, Pékerman recurrió a Farid Diaz para rellenar con cemento la era post-Armero. Farid tuvo un rendimiento parejo -nunca arriba del ocho pero jamás por abajo del seis- y consistente, pero la sorpresa y la explosión en el último cuarto en ese carril se había perdido. El ex lateral de Nacional no tiene ni el turbo para aparecer, ni la chispa para asociarse de Armero.
Ahora las cosas son muy distintas: gracias a la madurez de Fabra y a la explosión de Mojica en el equipo revelación de España, Colombia tiene dos laterales izquierdos de alto vuelo. Pékerman tiene herramientas para volver a lastimar a los rivales por el carril izquierdo. Más que preguntarse por quién es mejor, lo relevante es ¿quién le conviene más a esta Selección? Porque como lo ha explicado varias veces el ‘Cholo’ Simeone: “el mejor equipo no siempre son los once mejores”.
Si bien Fabra es un gran lateral, con un crecimiento espectacular en los últimos dos años y se ha destacado en una liga muy competitiva, la aparición de Mojica resulta muy interesante. El ruido del gran Girona de Pablo Machin debió golpear con fuerza el despacho de Don José, pues la convocatoria de Mojica llegó con retraso. Ya en octubre del 2017 Maffeo y Mojica incendiaban el césped de Montilivi con un 3-4-3 ofensivo, atrevido, de espectáculo y juego asociado.
Johan jugó 30 de los 38 partidos de liga. Tuvo un nivel excepcional en un contexto táctico muy favorable para sus condiciones.Y además, no jugó como lateral ortodoxo sino como lateral/volante en un equipo que replegado defendía con cinco, pero que para atacar usó a estos laterales/volantes para ganar apertura, abrir al equipo contrario y desbordar y desequilibrar haciendo tándem con los extremos (Borja Garcia y Portu).
Y, ¿en la Selección?
Su primer partido fue contra Australia. Algunos dirán que es muy poco para dar un diagnóstico; para mi fue suficiente: con su gran zurda logró meter cinco muy buenos centros que dejaron a Falcao y a Borja de cara al gol. Un partido le bastó para demostrarnos que es capaz de hacer con Colombia lo que semana a semana hace en el Girona.
Mojica es de lejos el mejor lateral colombiano que lanza centros en velocidad. Tiene una precisión y una inteligencia notable para encontrar a compañeros en los últimos metros. Eso para el Tigre -y para el equipo- es oro. Falcao necesita buenos centradores y extremos que ganen la raya.
Además la energía y dinámica de Mojica para pasar al ataque es mayor que la de Fabra. El de Boca es potente y tiene buena conducción, pero Mojica, además de eso, tiene fantasía y dribling. Guardando proporciones tiene cosas de Marcelo. Sale de una jaula o escapa de la raya con recursos geniales.
Si en este mundial vamos a tener el placer y la fortuna de tener al Tigre asechando el área de los rivales, la mejor opción es contar con el francotirador ideal para encontrar su cabeza. No le hemos preguntado, pero sabemos que Falcao prefiere a Mojica.
Twitter: @sebastiannohra
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