{"id":15642,"date":"2019-01-08T13:00:46","date_gmt":"2019-01-08T18:00:46","guid":{"rendered":"https:\/\/hablaelbalon.com\/?p=15642"},"modified":"2019-01-08T13:11:18","modified_gmt":"2019-01-08T18:11:18","slug":"millonarios-jhon-duque-universidad-andes","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/hablaelbalon.com\/futbol-colombiano\/millonarios-jhon-duque-universidad-andes","title":{"rendered":"Yo fui suplente de Jhon Duque en la Universidad de los Andes"},"content":{"rendered":"

De m\u00e1gico enlace en el f\u00fatbol universitario a intenso volante de marca del mejor Millonarios de los \u00faltimos a\u00f1os. Esta es la historia desconocida de Jhon Duque.<\/strong><\/p>\n

Era\u00a0enero del 2012. La primera semana de otro largo semestre en la Universidad de los Andes. En el horizonte de sus infinitas escaleras ve\u00eda\u00a0un semestre de m\u00e1s libros y menos f\u00fatbol. Seis meses atr\u00e1s, reci\u00e9n sal\u00eda de una lesi\u00f3n de ligamento cruzado y fui rechazado en las pruebas para entrar a la Selecci\u00f3n. Entrar al equipo no era sencillo. O se ten\u00eda amigos en el equipo que le mojaran la oreja al entrenador o hab\u00eda que sobresalir en las pruebas que se hac\u00edan en el primer entrenamiento de cada semestre. Hab\u00eda perdido la fe en mi f\u00fatbol. Pensaba que lo mejor que ten\u00eda se\u00a0hab\u00eda ido con la operaci\u00f3n de rodilla, pero un amigo me anim\u00f3 a probarme otra vez.<\/p>\n

 <\/p>\n

\"Camiseta<\/a><\/p>\n

 <\/p>\n

 <\/p>\n

El entrenador de entonces, Fidel Castro,\u00a0prefer\u00eda mantener\u00a0su bloque de confianza y cada semestre abr\u00eda convocatoria para meter\u00a0dos, m\u00e1ximo tres jugadores que reemplazaran a los que se hab\u00edan graduado. El proceso era un desastre. Sub\u00edan\u00a0a aquella cancha\u00a0acabada\u00a0y sin luz aproximadamente 120 aspirantes de todos los niveles. El reto era, en 15 minutos, mostrar ‘algo’ en una selva de camisetas, petos, patadas, jugadores malos, buenos, ego\u00edstas, vendedores de humo y rodillones.<\/p>\n

Lea tambi\u00e9n: Cuando el nuevo t\u00e9cnico del Arsenal habl\u00f3 sobre dirigir a Millonarios<\/strong> <\/a><\/p>\n

 <\/p>\n

\"jhon-duque\"
Jhon con el ‘Guajiro’ en Girardot.<\/figcaption><\/figure>\n

 <\/p>\n

La suerte contaba mucho. La mitad de las opciones pasaba por la calidad de los compa\u00f1eros con los que a uno le tocara en el equipo. Muchos buenos jugadores se fueron sin ser vistos, porque el azar los dej\u00f3 con ‘carrolocos’ o delanteros facheros que no la soltaban.<\/p>\n

Aquella vez, en mi segundo intento de entrar al equipo, la fortuna me tir\u00f3 un centro: un estudiante de 19 a\u00f1os de ingenier\u00eda industrial, callado y de bajo perfil, jug\u00f3 a mi lado en el \u00faltimo partido de la prueba. Era de esos jugadores que solo con\u00a0verles el\u00a0parado se sabe que juegan muy bien. El f\u00fatbol se ve y se huele. El que lo tiene lo tiene.<\/p>\n

 <\/p>\n

\"Camiseta<\/a><\/p>\n

 <\/p>\n

Era un 11 contra 11. El estudiante de ingenier\u00eda y yo \u00e9ramos volantes en el mismo equipo. A \u00e9l solo le bastaron dos jugadas para iluminar la cancha y dejar claro\u00a0el ‘mostro’ que era. No hab\u00eda dudas. Era distinto. Mi suerte fue que en uno de los ataques de nuestro equipo, entre \u00e9l y yo armamos una jugada de tres o cuatro paredes. \u00a1Tic, tac! \u00a1Tic, tac! A un toque desde la mitad hasta la porter\u00eda. Es muy probable que haya sido lo \u00fanico\u00a0bueno\u00a0que hice ese d\u00eda, pero me alcanz\u00f3 para entrar al equipo.<\/p>\n

En el minuto 2:49 lo puede ver a mano sentado, callado, con la humildad de siempre…<\/p>\n