El origen de tres apodos emblemáticos del fútbol colombiano.
Julio Avelino ‘Pelo’e burra’ Comesaña
Aunque es uruguayo, en Barranquilla todos saben que Comesaña es un costeño más, por eso, desde sus primeros años en el banquillo tiburón, los hinchas del Junior empezaron a ‘vacilar’ al exjugador y técnico comparando las canas en su cabeza con el pelaje de un animal tan barranquillero como la burra.
No hay dudas de que el pueblo costeño cuenta con la idiosincrasia futbolera más linda de todo el país.
También quiere saber el origen del apodo del ‘Pibe’ y dos más…
Darío ‘El Chusco’ Sierra
La historia del ‘Chusco’ nace del amor maternal. Del ciego amor maternal. Desde los primeros los meses de nacido, su mamá, hablando con el corazón, decidió llamarlo ‘Chusco’. Su ‘Chusco’.
Hoy, calvo, retirado de las canchas y con las huellas que deja el tiempo, cuando se habla del ‘Chusco’ la pregunta sale fácil: “¿y este tipo qué tiene de chusco?”. El amor de madre todo lo puede.
Le interesa saber de dónde viene el apodo de ‘Cha cha cha’ Martínez y dos más…
José Eugenio “Cheché” Hernández
Aquel doble ‘Che’ del técnico del Tolima obedece a un nombre compuesto muy del interior del país, netamente rolo. Sin embargo, es lo único que el “Cheché” conserva de su tierra natal, pues en más de una ocasión ha admitido que detesta la ciudad de Bogotá, su olor, el frío, el ajiaco y la changua.
A fin de cuentas, el “Cheché” puede argumentar que uno no es de donde nace, sino de donde se siente realmente; aunque hasta que deje los banquillos, será siempre recordado por su apodo cachaco.
Hernán Darío ‘Bolillo’ Gómez
Desde su época como futbolista supo hacerse conocer en el mundillo de la pelota gracias a su carácter. El ‘Bolillo’ podía no tener la mejor técnica, pero compensaba con nervio y fiereza.
Después del retiro, ya como asistente de ‘Pacho’ Maturana, Hernán Darío siguió viviendo el fútbol con la misma intensidad. Amargado, malgeniado, tosco adjetivaban sus 1,67 de estatura. En más de una ocasión, las concentraciones de Atlético Nacional o la Selección, se despertaron en la madrugada con los alaridos del ‘Bolillo’ regañando a Faustino cuando se volaba de los hoteles en busca de rumba.
Pero aunque Hernán Darío, cuando se sale de la ropa da bolillo, el apodo no viene de ahí (no solo de ahí). Pues casi cuarenta años atrás, su ex compañero y defensa José Zárate, hoy en mejor vida, al verlo recién peluqueado, calvo, lo equiparó con gracia y para la posteridad como el ‘Bolillo’ Gómez.
Foto:
Futbolred