Del partido del martes en el Atahualpa, depende un porcentaje importante de la clasificación a Rusia 2018. Hay que levantar bastante el rendimiento para poder rasguñarle puntos a Ecuador. Proponemos cuatro cambios para poder hacerlo.
Colombia enfrentará un rival que de local es radicalmente diferente a como es de visitante. Ecuador en su estadio se crece, y si tiene una buena tarde, le pasa el rodillo al que tenga enfrente. Es un equipo rapidísimo, con una fortaleza física sobresaliente y con jugadores muy desequilibrantes como los Valencia, Jefferson Montero.
En las recientes doble fechas de eliminatorias, Pékerman ha tenido un plan en la formación y en lo estratégico para Barranquilla, y otro para el partido de visitante. Con Paraguay y Chile de visitante funcionó. Contra Brasil y Argentina fue un desastre.
Duvan Zapata titular
Sin la posibilidad de desarrollar un modelo de juego estable por el tiempo de trabajo, las selecciones viven principalmente de los momentos de los jugadores. El presente de Duvan en Italia es espectacular. Aprovechar su confianza es una buena razón para ponerlo, pero no es la única.
El delantero que juegue deberá enfrentar a los centrales Mina y Caicedo. Jugadores que miden 1.88 y 186 respectivamente. La talla y la fortaleza de Zapata pueden ser muy útiles para sobrevivir entre estos gigantes, ganar pelotas por arriba, y ser más fuertes en las segundas jugadas. Además, Colombia deberá ser un bloque defensivamente solidario. Al momento de robar, una buena herramienta para avanzar en la cancha con el balón, es buscando a Zapata de espaldas, que aguante el balón con su fortaleza y espere la llegada de James, Cuadrado y compañía para descargar.
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El olvidado: Frank Fabra
La opinión condena con facilidad los malos debuts. Pretendemos que un jugador por ser convocado, tiene automáticamente la obligación de ser sobresaliente. Ponerse la camiseta por primera vez no es sencillo. El debut de Fabra no fue bueno. En la Copa América Centenario tuvo dos partidos muy malos contra Chile y Costa Rica, y desde entonces, nadie lo pide.
Con los serios problemas de profundidad que tiene Colombia en el lateral izquierdo, la apuesta de Fabra gana más peso. Desde que llegó a Boca, ha crecido muchísimo, es mejor jugador y se ganó la confianza de Barros Schellotto.
Por ese lado, Ecuador ataca con el poderoso tándem Paredes-Valencia. Dos trenes muy potentes. De los tres laterales izquierdos convocados, Armero, Díaz y Fabra, el de Boca es el más potente, el que mejor le puede seguir el ritmo de ida y vuelta a Antonio Valencia. Y lo más importante, a la hora de atacar, Fabra es el que más ofrece recursos para romper gambetiando, proponiendo una pared, llegando desde atrás. Es el más completo.
Un sabelotodo en la mitad
Ecuador tendrá la sensible baja de Cristian Novoa por acumulación de amarillas. Este volante es el eje del juego del equipo. Sin él, Colombia tiene más opciones de ganar la batalla en la mitad de la cancha. Para eso, la pareja de Sánchez en la mitad debe jugar un gran partido con y sin balón.
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No descartamos que Pékerman juegue con tres volantes de recuperación como en Asunción, pero pensando en su clásico doble cinco, la mejor opción para acompañar a la ´Roca` sería Abel Aguilar. Soldado de mil batallas, un jugador que la camiseta de la selección no le pesa y que tiene ese buen pase para encontrar hombres libres en cualquier situación. El equipo necesita defender bien, pero necesitará mucho juego. Si Colombia solo se defiende y no puede salir, entre la altura y el ritmo de juego de Ecuador, nos pueden pasar por encima.
No solo es para rematar partidos
Se viene asumiendo en el imaginario colectivo que Edwin Cardona es ideal para rematar partidos. Le metió un gol en el último minuto a Perú en Barranquilla, y nos ha dado seis puntos en el tiempo de descuento contra Bolivia y Paraguay. Pero un jugador no es bueno para rematar partidos. El que es bueno sirve en cualquier cancha en cualquier momento.
Con la baja de Muriel y con los cuatro volante que suele proponer Quinteros, es muy probable que Pékerman vuelva a jugar con un solo delantero. El mejor partido de Colombia en la eliminatoria fue precisamente contra Ecuador en el Metropolitano. El rival venía imparable, y en una grandísimo partido de James, Cuadrado y Cardona, Colombia fue muy superior. El equipo esa tarde jugó en un 4-2-3-1 con Cardona recostado sobre la izquierda, jugando cerca de James y dejándole el pasillo a su lateral.
La misma fórmula podría funcionar en Quito. Con dos volantes de recuperación, Cuadrado, James y Cardona, Colombia tendría cinco volantes. Todos de buena técnica y buen pase. Un buen escenario para ganar la mitad de la cancha.
De esta manera, humildemente, proponemos la siguiente alineación: Ospina; Arias, Mina, Zapata, Fabra; Sánchez, Aguilar; Cardona, James, Cuadrado; Zapata.
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Foto: holaciudad.com