Después de tener un año de ensueño y convertirse en referente de Millos, Mosquera sorprendió a todo el mundo en enero cuando decidió partir rumbo al fútbol de Estados Unidos. Le contamos cómo le ha ido hasta ahora con los gringos.
Después de quedar por fuera de los playoffs de la MLS el año pasado, el Dallas FC decidió traer a Santiago Mosquera para mejorar su rendimiento en la temporada 2018. En el equipo Harold Santiago se encontró con dos colombianos más: el volante barranquillero Michael Barrios y el director técnico Óscar Pareja.
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Apenas se bajó del avión, le tocó enfrentarse al primer gran reto de la temporada en los cuartos de final de la Concachampions contra el Tauro FC de la liga panameña. Fue titular en el partido de ida donde el Dallas perdió 1-0 y en la vuelta, de local, Pareja lo mandó a la banca. El equipo, a pesar de ganar 3-2, quedó afuera por el gol visitante.
En el primer partido de liga, el 3 de marzo contra el Salt Lake City, el DT colombiano volvió a apostar por Mosquera desde el vamos como volante abierto por izquierda. El resultado final fue un empate 1-1 y la actuación de Harold Santiago, poco convincente. En el siguiente partido contra el Seattle Sounders volvió al banquillo y no jugó un solo minuto. El resultado: 3-0 a favor de Dallas. Desde entonces, Mosquera no ha vuelto a ser titular, aunque siempre entró para cerrar los partidos en los últimos minutos.
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Hoy, con 5 partidos jugados, el Dallas se encuentra en puestos de playoff y con un rendimiento aceptable (2G-3E-0P). Mosquera por su parte sigue sin adaptarse del todo al fútbo gringo, no ha metido el primer gol y sigue sin dar muestra de las diabólicas gambetas que exhibió algún día en el Campín.
Mosquera ha jugado tan solo 259 minutos de 630 posibles, es decir, el 41%. Una cifra muy por debajo de lo que se espera para un crack de su categoría y que llegó al Dallas como jugador franquicia. No se trata de condenarlo, pues jugando tan poco es difícil coger vuelo. Incluso, en la MLS, donde todo lo calculan, dicen que en promedio los jugadores nuevos necesitan 520 minutos para comenzar a adaptarse. Sin embargo, lo que sí es claro es que siguen y siguen apareciendo casos de jugadores a los que la llegada a Estados Unidos no les cae bien. Parece que después de todo no es una liga tan fácil y nadie la juega caminando.
Sabemos que Millos lo extraña y si la cosa sigue así, y los minutos son tan escasos, muy pronto Santi también comenzará a extrañar a Millos.
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golcaracol.com