La historia de Alfredo Morelos es apasionante: de olvidado en el DIM a tener mejores números que los delanteros de la Selección Colombia.
Julio de 2014. Un partido cualquiera de Copa Colombia. Intrascendente. Medellín contra Águilas Doradas, horario de diez de la mañana, probablemente. Encontrar las alineaciones es difícil (en internet no hay acceso al registro), pero hoy sabemos que un tal Alfredo Morelos debutó ese día en el DIM.
Dieciocho años tenía para entonces, pero ya llevaba un par ellos alternando con el equipo profesional. Apenas llegó de su natal Cereté, medio año después, el ‘Bolillo’ Gómez lo había subido. Como muchos pelados que persiguen el sueño sin calcular, Alfredo había venido desde lejos a probar. Como muy pocos, logró quedarse.
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Debutó esa mañana perdida de julio y a partir de ahí jugó 14 partidos en los que hizo 6 goles entre Liga y Copa. Nada mal, pero no suficiente para convencer a Hernán Torres, el señor serio que había reemplazado al ‘Bolillo’. En 2015 contó poco, primero para Torres y luego para Leonel Álvarez. Jugó 11 veces en el año y no gritó ni una vez. ¿Cuántos casos así? Jugadores que debutan, juegan un par de veces y se desaparecen para siempre.
Pero eso no iba a pasar con Alfredo. Y eso que hizo la difícil: le dijeron que existía la posibilidad de irse cedido al HJK Helsinki. Él, con los ojos llenos de ambición, empacó la maleta, se puso unos guantes para burlar a los -20 grados centígrados del invierno finlandés y se montó al avión. ¿Cuántos casos así? Colombianos talentosos, desesperados, que cogen el primer tren a Europa y vuelven al mes con el rabo entre las piernas, huyendo del frío y extrañando la comida.
Alfredo era diferente. Se fue a principios de 2016 y en diciembre el club anunció que quería ejercer la opción de compra. Un millón de dólares abonaron por él. En ese año hizo 30 goles y fue el segundo colombiano que más goles hizo alrededor del mundo, solo Miguel Borja lo superó.
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El 2017 lo arrancó, o más bien, lo siguió como una máquina. A final de temporada sus números en el Helsinki eran astronómicos: un año y medio, 59 partidos, 44 goles y 12 asistencias. El Rangers de Escocia quiso sus servicios. No es el Real Madrid, pero juega en uno de los dos equipos más grandes de una liga histórica.
¿Usted está esperando que pase algo malo? Pues siga esperando. Está historia es rara, no hay caída. Alfredo llegó a Escocia, su equipo es segundo, él ha jugado 30 partidos, la ha metido 16 veces (12 en liga) y es el máximo goleador de la Scottish Premier League.
Este niño de 21 años es un delantero miedoso. Rápido, fuerte, ambidiestro y a pesar de sus 177 centímetros va muy bien por arriba. Si uno repasa sus goles en YouTube no encuentra nada espectacular, no hay caños, no hay chilenas. Morelos es un tipo sencillo, pero lo que toca, lo guarda. Algo tiene que nos hace pensar en Falcao.
Ya fue a la Selección Sub-17 y a la Sub-20, y por supuesto hizo goles. No se trata de insinuar nada, ni de decir que lo lleven a Rusia, pero muchos han sido convocados a algún amistosillo por menos. Y un datico más: el máximo goleador colombiano del 2017 fue Falcao, ¿y el segundo? Adivine.
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Foto:
Belfast Telegraph