La Selección del Pibe contra la de James ¿Cuál gana?

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En la patria del realismo mágico, suponga que podemos mezclar el espacio y el tiempo para enfrentar a estas dos selecciones. ¿Por cuál apostaría? Para ayudarle a decidir le traemos la siguiente comparación

 

Variantes ofensivas

El tremendo talento de James, Cuadrado, Cardona, Macnelly y Quintero sumado al buen primer pase de Aguilar y a la capacidad de Falcao y Teo para participar en los circuitos ofensivos hacen que este equipo supere al del ‘Pibe’.

 

En la Selección de Valderrama, aunque había un eventual acompañamiento de Freddy Rincón , y Asprilla rompía todo con sus explosiones, la creación dependía principalmente del samario. No podemos decir que el resto carecía de técnica, pero sí que tenía más corazón y ganas que juego.

 

1-0 ganando los de James: gran definición de Cardona tras una linda pared con Bacca. Cualquier parecido con la realidad…

 

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Físico

En estatura, velocidad y peso el promedio del equipo del ‘Pibe’ era superior. James y compañía saldrían heridos tras enfrentar en la mitad a Leonel Álvarez, Barrabás Gómez o ‘Carepa’ Gaviria; todos tanques de guerra con un corazón enorme. Cuando el ‘Pibe’ ponía la cola para cubrir un balón, no había Carlos Sánchez ni Wilmar Barrios que pudiera tumbarlo.

 

Yo temería por la rodilla de Falcao en cada choque con Luis Carlos Perea, literalmente un muro, Alexis Mendoza o Andrés Escobar. Ni Mina ni Yepes habrían lucido tan imponentes al lado de Faustino, del ‘Tren’ o del ‘Palomo’ Usuriaga.

 

Empate a 1-1 tras un pase filtrado del ‘Pibe’ que recibe Freddy en velocidad a la espalda de los centrales y define por debajo de los pies de Ospina.

 

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Personalidad

Así mismo, el equipo del ‘Pibe’ tenía más huevos que el de James. En el campo había por lo menos cuatro voces con oficio y autoridad suficiente para “putear” y arengar a sus compañeros. No eran de los que se ponían el tapabocas delante de los medios, hablaban sin miedo dentro y fuera de la cancha. La Selección de James parece no tener ninguno de este tipo tras el retiro de Yepes.

 

Se va adelante 2-1 el equipo del ‘Pibe’ por una corajeada de Leonel en el medio, seguido de una contra que define Asprilla.

 

Arqueros

Es quizá la elección más difícil porque la calidad de Ospina es incuestionable y tiene atajadas para el recuerdo. Bien vale siempre el ¡Tú, tranquilo!

 

Sin embargo, lo estamos comparando con leyendas como René Higuita (¡Ronaldinho juagaba a ser René!) u Oscar Córdoba, arqueros que literalmente le entregaron Copas Libertadores a sus equipos en definiciones por penales; están bañados por la gloria que aún no tiene Ospina.

 

3-1, gol de tiro libre de Higuita.

 

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Estrategas y roce internacional

Con el debido respeto: Pékerman es más que Maturana + Bolillo + todos sus asistentes juntos. A esto súmele que en la Selección de James casi todos están en Europa y pelean por titularidad en los Real Madrids, Juventus, Milans, Inters y Mónacos.

 

En el otro caso algunos apenas tuvieron pasos fugaces por Europa. El único que se mantuvo mucho tiempo fue Asprilla, pero en el Parma y el Newcastle. No es lo mismo.

 

Descuenta James de volea: 3-2.

 

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Profesionalismo y disciplina

El ‘Tino’ pudo ser Balón de Oro si hubiera querido. Sin embargo, Fausto decidió ser feliz a su manera, un gigoló suelto en Colombia: portada de revistas, cabalgatas, novias y tiros al aire. Su vida extrafutbolística, y la de todos sus compañeros, dio para toda una telenovela.

 

Por otra parte, los de hoy son hombres de familia, de su casa, tienen una forma diferente de asimilar el éxito y es quizá por eso que continúan en Europa y son pretendidos por los mejores clubes.

 

Con esto, Falcao pone ahora un 3-3 que pone a llorar a todo un país de emoción, estando a muy poco del final.

 

Empate a tres. Si hay algo seguro es que ambos, cada  uno con su estilo, marcaron nuestra historia. El verdadero gran ganador es el hincha colombiano; amigos y familias enteras que guardan preciados recuerdos delante de un televisor, escuchando a Javier Fernández agotar hasta el último suspiro en un grito de gol o bailando esa salsita al son de “cánteme ese gol, William, diga que hubo gol”.

 

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Foto:

Colombia.com


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