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Se vino el Mundial y en Colombia somos los que somos. Pékerman tiene definida una base de jugadores y más allá de alguna sorpresa aislada, la verdad es que hoy está claro quiénes son los seleccionables para cada uno de los puestos. La lista final la definirá el ritmo y el nivel con el que estos lleguen a junio.
El arco es certeza. Laterales y centrales hay, y de alto vuelo. Los volantes ofensivos, a pesar de la lesión de Cuadrado, gracias al momento dorado de James, nos dan tranquilidad. La cosa se pone un poco más peluda con los volantes de marca, pues no le tenemos una pareja sólida a la ‘Roca’ Sánchez y el problema más jodido son los delanteros.
Nos falta gol. No lo digo yo, lo dicen los números…
En la Eliminatoria Suramericana hicimos 21 goles. Solo la peor Argentina de la historia (19), Venezuela (19), Paraguay (19) y Bolivia (16) hicieron menos que nosotros. El problema va más allá, porque de esos 21 solo seis los hicieron nuestros delanteros (Teo hizo uno; Bacca, tres; y Falcao, dos). Y se pone peor. Desde el Mundial de Brasil, Colombia jugó 28 partidos de competiciones oficiales (dos Copas América y la Eliminatoria) e hizo 29 goles, de los cuales solo el 27% fueron de nuestros delanteros. La cuota goleadora de la Selección, hoy, la ponen James, Cardona y los centrales.
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Usted puede decir que Falcao será el hombre que solucione eso, que después de sus lesiones volvió a ser el mismo y que arrancó la temporada como una moto. Sin embargo, aunque suena desgarrador, dar por sentado que el Tigre llegará entero al Mundial puede ser exceso de optimismo. Falcao es un goleador de racamandraca (23 goles en 29 partidos esta temporada), pero las lesiones musculares —su karma en los últimos años— le han quitado continuidad y no dejan de ser una amenaza. A finales del año pasado una lesión lo tuvo quieto de mitad de octubre a mitad de noviembre y a principios de este año ya completa un mes sin jugar por otra lesión muscular. Y si él no está… ¿Quién?
Mucho tuvo que ver el mal juego de Colombia, pero lo de Bacca en la Eliminatoria fue terrible. Arrancó bien, hizo tres goles en las primeras tres fechas y luego su nivel cayó dramáticamente. Pékerman lo aguantó hasta la fecha 14, cuando lo borró del equipo titular. En el Villarreal parece haber resurgido, está jugando bien, es titular y se ha adaptado al modelo de juego del equipo. Sin embargo, sigue muy lejos de sus mejores registros goleadores; siete goles en lo que va de la temporada.
Duvan Zapata fue la gran sorpresa del partido contra Perú. Y jugó bien: luchó, desgastó y bajó la pelota del gol de James, aun así hay que reconocer que él no es un delantero goleador. La temporada más goleadora de su historia hasta la fecha fue por allá en el 2012, jugaba en Estudiantes e hizo 13 goles. Como Teo, que te da juego y pivote, Duvan te da otras cosas pero no te garantiza el grito sagrado. Con la Selección no ha hecho el primero.
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Luego está el tema de Muriel, del que muchos dicen, por lo bien que está jugando de nueve en el Sevilla, que debería ser titular. El partido que se jugó en Champions contra el Manchester United fue buenísimo. Rápido, potente, desequilibrante, pidiéndola siempre. Le ganó la titularidad a Ben Yedder y fue el mejor del Sevilla, un peligro constante en el arco de De Gea. Solo le faltó el gol… Sí, solo le faltó lo que se le pide a un nueve. Con Colombia ha jugado 17 partidos y solo hizo un gol, en un amistoso contra Guatemala. Darle la llave del gol sería desaprovecharlo en la banda, en donde cada vez que jugó salió figura.
Al día de hoy, por características, lo más parecido a un killer que tenemos (Falcao aparte) se llama Miguel Borja. También él ha tenido unos últimos meses irregulares y Pékerman no lo tuvo en cuenta para los partidos contra Paraguay y Perú. Hay otros casos como los de Alfredo Morelos o Fernando Uribe que están haciendo goles, pero que no han hecho parte del proceso.
Siéntese y respire. Nadie está diciendo que nuestros delanteros sean malos, al revés. Lo que quiero es llamarle a las cosas por su nombre y que no neguemos lo innegable. Desde que Falcao se rompió el ligamento cruzado hasta hoy, Colombia no ha tenido al goleador que tienen todas las grandes selecciones del mundo. Si de aquí a Rusia le vuelve a pasar algo, será un “apague y vámonos”.
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