Millonarios le ganó a Patriotas en Tunja y, además de ajustar cuentas en la tabla, le regaló tres grandes noticias a sus hinchas para que terminen la semana con una sonrisa de oreja a oreja.
El despertar del Búfalo
Roberto Ovelar cortó una sequía de casi seis meses sin gritar gol, pero quizás lo más importante fue que volvió a ser ese delantero que en algún momento supo conquistar las canchas del FPC: un nueve experto en salir del área para recibir de espaldas y pivotear.
Sigue teniendo un tanque de oxígeno que no lo deja desplegar al máximo su intensidad durante 90 minutos, pero para partidos como el de hoy,de visitante y en los que Russo quiera rotar, la alternativa de Ovelar como único delantero emociona.
César Carrillo: el ‘Mello’ que siempre cumple
Por allá en abril debutó como titular contra el Bucaramanga con un hat-trick. Después, cuando le tocó ponerse las botas para jugar Libertadores contra nada más y nada menos que el Corinthians, volvió a romperla metiendo un pepinazo de antología. Aún así, para el nuevo semestre Russo volvió banquearlo; incluso, en el partido de Sudamericana donde Duque estaba suspendido, prefirió desarmar la defensa y poner a De Los Santos como volante.
Pero a Carrillo todo eso le resbala y hoy que volvió a tener chance, volvió a romperla. No solo destrabando el partido con el riflazo que puso el 0-1, sino enrrocando a la perfección al lado de Duque, robando, trabando y entregándola redondita casi siempre (tuvo 94% de precisión en pases).
Salazar: el mejor de lo que va de semestre
Hoy fue la tarde en la que, seguramente, Elíser Quiñones perdió definitivamente su puesto como titular. Porque a pesar de que ya lo había mostrado contra el Chicó y General Díaz, la media hora de Salazar, contando el lírico enganche del primer gol, terminaron de convencer que el pelado debe ser el único dueño de la banda izquierda.
Decir esto en el tercer partido del semestre puede ser (y es) apresurado, pero como va, Salazar pinta para ser MVP no solo de Millos, ¡sino de la Liga!
La ñapa: por fin se cerró un partido
El empate contra General Díaz fue el sexto partido en el año en el que Millonarios dejó escapar tres puntos en los últimos 15 minutos. Por eso el gol de Ovelar fue un suspiro que liberó toda la tensión de los hinchas que ya estaban acostumbrados a ver como las victorias se escapaban de las manos como granos de arena.
Foto:
Caracol Radio
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